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La Neurosicoeducadora Lucrecia Prat Gay brindó una charla denominada “Neuroeducación en el aula en la nueva escuela“ el miércoles 12 de mayo, en el marco del ciclo de charlas Éxito Online.
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La charla se refirió a cómo queremos que sea el aula de la escuela que venga después de la pandemia. “Podemos hablar de neurociencias ahora con bastante más conocimiento que hace 40 o 50 años. Ahora podemos estudiar cerebros vivos gracias a la tecnología no invasiva. Teniendo esta herramienta extraordinaria de la neurociencia como educadores y sería una lástima que no la utilicemos. No es la única herramienta sino una de todas las que tenemos”, explicó Lucrecia Prat Gay.
La charla, organizada por Revista Colegio y moderada por Marcelo Rivera, fue transmitida en vivo por YouTube.
“Me gustaría poder discutir en qué cosas nos está dando una mano el covid-19 para poder repensar el sistema educativo. Empezamos a darnos cuenta de que estos cambios nos venían bien para cuando volvamos a la presencialidad”, dijo.
Reiteró que “hay lemas de la vida que debemos desaprender” y ejemplificó: “No es cierto que a las palabras se las lleva el viento. Nuestras palabras cambian nuestra materia gris y la de las personas a las que se las decimos”, Lucrecia mencionó la importancia de romper ciertos paradigmas en la nueva escuela e incorporar el tener en cuenta el clima emocional”.
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Prat Gay manifestó que “otra afirmación falsa es ´Pienso, luego existo´. Damasio, autor del libro ‘El error de Descartes’, confirma: ´Siento, luego existo´. Siempre viene primero la emoción y luego viene la cognición. No hay aprendizaje sin emoción”.
“Necesitamos crear climas emocionales que conduzcan al aprendizaje”, mencionó. “Si uno se siente muy triste, muy enojado o asustado hay maneras de contrarrestar esa emoción negativa si uno empieza a tener una positiva que la neutralice, según hipótesis de Mary Helen Immordino-Yang y Antonio Damasio. “Sabemos que podemos tener el control de nuestro cerebro y hacer neuroplasticidad autodirigida. No digo que sea fácil pero es posible. Por ejemplo: empezar una clase por Zoom celebrando el hecho de que estamos acá y somos sobrevivientes. Arranquemos hablando de lo que funciona y de lo que está bien. Reforzar lo positivo no es ser inconsciente o idealista sino elegir dónde queremos poner la energía”.
“¿Los espacios tienen que seguir siendo con bancos? -se preguntó-. Podría haber almohadones, estar afuera… La neuroeducación debe ser parte de la currícula; toda esa información no es solo para los científicos sino un conocimiento crucial para todos. El entender qué me está pasando en el cerebro y cómo hacer para ayudarlo y poder encender mi parte más humana debería ser algo que nos enseñen desde salita de 5”, abrevió la especialista.
“Dejemos de decirles a nuestros alumnos `No te enojes´. Podemos ayudarlos a modelar la respuesta a la emoción pero no la emoción en sí”, pidió.
Lucrecia Prat Gay es Self-Esteem Practitioner, docente de alma y aprendiz eterna. Cofundadora y exdirectora de Inglés del Colegio Río de la Plata Sur y directora del Área de Educación en Asociación Educar.
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